martes, 17 de abril de 2018

EL CAMBIO VIENE DE DENTRO


     Si fuera transparentemente sincera contigo, conmigo, esta noche te contaría todo lo que me pasa. Te diría de antemano, porque quien avisa no es traidor, que no te va a gustar; y que si no es agradable de escuchar, mucho menos de sentir. No te diría que no duermo, porque es mentira, el sueño me ayuda a sobrevivir, es como un bálsamo. Lo que si te diría es que no quiero despertarme por las mañanas, y que ojalá lo que me pasa fuera pereza matutina. Te contaría que con cada palabra que voy escribiendo, mi miedo se hace más palpable, porque no soy tonta: nadie quiere a su lado una persona depresiva, no me engaño. Y es por eso que no te cuento ni la mitad de mi vida, ni de lo que me pasa por la cabeza, porque yo soy más de regalar la parte buena, que de la mala ya me encargo yo sola, que los trapos sucios supuestamente se lavan en casa, y eso que no tengo muy claro ni cómo funciona esta lavadora. Quizá te diga que es insufrible vivir a medio gas. O el tópico de verlo todo en escala de grises. Y es mucho peor saber que puedes hacer algo,  que podrías reaccionar  de una puta vez y hacer lo que sea, y simplemente no lo haces. No sé si es por falta de fuerzas, de ganas o si es el miedo, o la despreciable conformidad. De verdad que no lo sé. O sí. El problema soy yo.






El marcapáginas del silencio.

martes, 20 de octubre de 2015

NUDOS


     Tendré que desenredarme el pelo, porque el cuerpo hoy ya no puedo. Sigue hecho un nudo en tu adiós. Y el tiempo si cabe lo aprieta más fuerte.

El marcapáginas del silencio.

martes, 12 de mayo de 2015

BAILE DE SONRISAS

Y pienso colgarme de tu cuello para bailar, como la luna se cuelga del cielo. Vamos a no pensar en mañana, a cerrar los ojos y verte. A correr al revés de la gente, reírnos fuerte y mirarnos de frente. A escasos centímetros de tu piel sigo viendo todo lo bueno que me das.

Tú hoy no te vas. Y tu nariz con mi nariz resguardan bajo sí la más bonita de las miradas, la de nuestras sonrisas. Y me da igual si me pisas en el baile mientras estemos cerca. Cerca del cielo o de la vida. De lo poco que nos costó querernos. Del ahora no quiero sin ti.


El marcapáginas del silencio.

viernes, 8 de mayo de 2015

QUE NO DEJEN DE VOLAR

Quiéreme todos los lunes,
quiéreme que hoy no hay más.

Quiéreme tumbada al sol,
la piel de otro color,
me voy durmiendo y vas.

Trazando sombras en la hierba,
escondiéndote detrás.
De su susurro al despertar.

Mirándome de cerca callas,
escuchas más de lo normal,
y yo ya no podré parar.

No podré parar.

Llena el vaso de ginebra,
baja la escalera,
no sé si vendrás.

Dime la verdad, no importa.
Lo que esconda. No importa lo de detrás.
Dímela y yo ya no podré parar.

No podré parar.

Se me escapan las sonrisas 
por la ventana y van
a perseguir tu humanidad.

Vuelan por este momento,
recorren cuerpos,
huelen a libertad.

Y ya no podrán parar.

Quiéreme todas las tardes,
quiéreme que aún hay más.


El marcapáginas del silencio.

miércoles, 10 de diciembre de 2014

DESQUICIADA DE QUE NO ME MIRES A CENTÍMETROS

Quiero que estés aquí. Pero mi deseo no va a traerte de vuelta. Mis "echarte de menos" y mis ganas no son el mejor vehículo en el que viajar. Y al final del día seguirás allí, tan apartado de mí, tan distante a pesar de nuestra voluntad. No puedo seguir así, me consume el frío de no tocarte. Me llevarían mis demonios a cualquier parte, desquiciada de que no me mires a centímetros, permanezco, sí. Quiero que estés aquí, ya lo sabes.



El marcapáginas del silencio.